La angustiosa situación de Pedro Valdenegro ha tocado el corazón de muchos chilenos. Con solo 10 años, este niño enfrenta un diagnóstico desafiante: una mutación en el gen PolG que causa una enfermedad mitocondrial extremadamente rara. El impacto de esta condición es devastador, ya que deteriora el sistema nervioso y afecta gravemente la calidad de vida del pequeño. A pesar de que su caso es el único registrado en Chile, su familia no se ha rendido en la búsqueda de un tratamiento que permita mejorar su salud.
Desde que tenía dos años, Pedrito ha experimentado síntomas inexplicables, incluyendo crisis neurológicas y dolores musculares intensos que han limitado sus capacidades. En un largo proceso de búsqueda de respuestas, su familia finalmente recibió un diagnóstico que, aunque esclarecedor, llegó con la dura realidad de que no hay tratamientos disponibles dentro del país. Esta falta de opciones llevó a la familia a buscar ayuda fuera de sus fronteras.
Las esperanzas de tratamiento para Pedrito surgieron al contactar al Dr. Roberto Hirsch, un reconocido especialista en enfermedades mitocondriales en el Hospital Albert Einstein, en São Paulo, Brasil. Con la ayuda de amigos y apoyo comunitario, la familia viajó a Brasil, donde Pedrito ha comenzado un tratamiento experimental. Aunque este protocolo no promete una cura definitiva, sí ofrece la posibilidad de estabilizar su salud a través de suplementos enzimáticos y atención integral que podría detener el avance de la enfermedad y, al mismo tiempo, mejorar su calidad de vida.
No obstante, la carga financiera de este tratamiento es monumental. La familia Valdenegro estima que necesita reunir $180 millones para cubrir todos los costos relacionados con el tratamiento de Pedrito, que incluyen hospitalizaciones, medicamentos importados, honorarios médicos y el apoyo familiar necesario. Esta cantidad es abrumadora para cualquier hogar, lo que ha llevado a la familia a recurrir a la generosidad de la comunidad.
Para llevar a cabo esta tarea, la familia ha lanzado una campaña solidaria en la red social Instagram, donde se pueden encontrar detalles sobre la condición de Pedro y cómo contribuir económicamente. Con el corazón en la mano, el padre de Pedrito, Felipe Valdenegro, expresó: «Estamos intentando salvarle la vida a nuestro único hijo. Esta oportunidad en Brasil podría significar que Pedro vuelva a ser un niño feliz y sin dolor. Sabemos que no podemos hacerlo solos, por eso estamos rogando por ayuda para conseguir este milagro». A través de su cuenta de Instagram @pedritopolg, los interesados pueden acceder a información actualizada y detalles sobre cómo colaborar.