La cápsula espacial tripulada china Shenzhou 19 ha culminado su misión con éxito, aterrizando en la zona de aterrizaje Dongfeng, y marcando un hito en la exploración espacial al establecer el récord del paseo espacial más largo de la historia. A bordo de esta misión regresaron a la Tierra tres astronautas: Cai Xuzhe, quien asumió el mando en su segunda misión, además de los novatos Song Lingdong y Wang Haoze. Este aterrizaje no solo representa el fin de su viaje, sino que también resalta los avances significativos de China en la carrera espacial, consolidándose como una potencia emergente en esta área.
Wang Haoze ha hecho historia al convertirse en la tercera mujer astronauta china en ir al espacio, un logro que la coloca en la lista de las 99 mujeres que han realizado esta hazaña a nivel mundial frente a más de 600 hombres. Forma parte de una nueva generación de astronautas que están contribuyendo a la expansión del programa espacial chino. La tripulación de Shenzhou 19 llegó a la Estación Espacial China (CSS) como parte de una serie de misiones que han mantenido la operación continua de esta instalación espacial, siendo la octava en llegar y la quinta en reemplazar a la anterior tripulación.
Durante su estancia en la CSS, Cai Xuzhe y Song Lingdong realizaron dos paseos espaciales en los cuales llevaron a cabo importantes tareas técnicas. El primero, el 17 de diciembre de 2024, marcó un antes y un después en la historia de la exploración espacial, ya que se convirtió en el paseo espacial más prolongado, alcanzando las nueve horas y seis minutos. Este logro no solo refuerza las capacidades de los astronautas chinos, sino que también demuestra la fiabilidad de la tecnología espacial desarrollada en el país. En el segundo paseo, realizado el 20 de enero de 2025, los astronautas instalaron escudos de protección contra la basura espacial y realizaron mantenimiento en la estación, asegurando su adecuada operatividad.
La misión Shenzhou 19 ha sido fundamental para asegurar el futuro de la estación espacial china, que se encuentra en constante desarrollo. Cada misión sucesiva se convierte en una pieza clave en el ambicioso plan de China de establecerse como líder en la exploración espacial. Desde el lanzamiento de Shenzhou 20 el 24 de enero, que dio continuidad a la presencia humana en la estación, la seguridad y el mantenimiento de esta infraestructura se han transformado en una prioridad, garantizando un entorno seguro para los futuros experimentos científicos y tecnología espacial.
Como se mencionó en las declaraciones realizadas el día del lanzamiento, China planea expandir su influencia en el ámbito espacial. El avance en la capacitación de sus astronautas y el éxito continuo de sus misiones demuestran el compromiso del país con la exploración y el desarrollo de la ciencia espacial. Con proyectos en marcha y un plan de acción claro, China se prepara para competir en la carrera hacia el establecimiento de una presencia sostenible en el espacio, lo cual podría transformar el panorama actual de la exploración astronáutica.