En medio del creciente debate en torno a la Ley N° 20.009 y su reciente reforma, conocida como Ley de Fraudes, la Universidad de Chile ha lanzado un nuevo curso de actualización titulado ‘Fraudes Financieros y Consumidores’. Este programa tiene como objetivo principal proporcionar herramientas prácticas a abogados, egresados, operadores judiciales y cualquier persona interesada en el ámbito de los fraudes financieros. La modalidad remota de las clases, a través de la plataforma Zoom, permite una amplia participación y flexibilidad para los asistentes.
El curso, que se articula en torno a la protección de los derechos de los consumidores frente a estos delitos, también aborda los retos legales que enfrentan tanto los usuarios como los emisores de medios de pago. Daniel Bustos Quijada, abogado especialista y académico del programa, destacó que este espacio de capacitación ofrece una perspectiva centrada en las relaciones de consumo y busca esclarecer los procedimientos que deben seguirse ante casos de fraude financiero.
Uno de los pilares del curso es la revisión de casos prácticos que ilustran las complejidades y desafíos en la aplicación de la Ley N° 20.009. Con un equipo académico destacar, conformado por figuras reconocidas en el ámbito legal como Viviana Muñoz y José Roa, las clases prometen profundizar en la responsabilidad civil y el rol de las autoridades administrativas ante caídas en la protección del consumidor. Este enfoque práctico permite que los participantes puedan enfrentar conflictos reales y aprender de ellos.
Bustos añadió que un aspecto crucial del programa es el análisis de cómo la ley influye en la acción de los emisores ante los tribunales y la forma en que se distribuyen los riesgos entre consumidores y proveedores. La diversidad de interpretaciones que ha surgido desde la implementación de la Ley N° 21.234 ha generado confusión y ha afectado a todos los involucrados, tanto a los consumidores que son víctimas de fraudes como a las entidades financieras que buscan cumplir con los nuevos marcos regulatorios.
Finalmente, Bustos enfatizó la necesidad de crear espacios de aprendizaje y discusión, que puedan ayudar a clarificar esta problemática. En un contexto donde las reformas legislativas son frecuentes y a menudo dificultan el entendimiento de los derechos y obligaciones, iniciativas como este curso son fundamentales para fomentar una adecuada formación de los profesionales del derecho, impulsando así una mejor defensa de los consumidores en el complejo mundo financiero.
