Un conductor de autobuses de la empresa Metropol ha denunciado su despido tras negarse a dejar a su perro de apoyo emocional, Cocky, en casa durante sus jornadas laborales. Antonio, el conductor afectado, alega que la decisión de la empresa fue «injusta y sin ningún aviso previo», resaltando la importancia de su mascota en su tratamiento psicológico. Según el relato, la nueva administración de Metropol no ha comprendido la situación como lo hicieron los jefes anteriores, quienes permitían la presencia de Cocky en su trabajo, lo que hacía más llevaderos sus trayectos por la ciudad.
Antonio ha revelado que Cocky le ha sido asignado por su psiquiatra debido a su historia de traumas laborales, incluida una serie de asaltos violentos que han ocasionado un estrés agudo y depresión. El conductor afirma que, tras estos incidentes, su vida cotidiana y su labor se vieron gravemente afectadas, hasta el punto en que su perro se convirtió en un elemento crucial de su bienestar emocional. «No podía salir a la calle sin su apoyo; Cocky me ayuda a manejar mis ansiedades y recuperar mi confianza», explicó.
La situación escaló cuando Antonio fue despedido, enfrentándose a la exigencia de presentar un certificado actualizado del perro para poder regresar a su puesto de trabajo. Sin embargo, admite que todavía está a la espera de una hora psicológica en un Cesfam (Centro de Salud Familiar) que le permita obtener el documento requerido. Esto ha dejado al conductor en una posición difícil, ya que se siente desprotegido y consternado por la repentina pérdida de su empleo.
El sindicato al que pertenece Antonio ha estado al tanto de la situación y, según sus representantes, se han comprometido a apoyarlo en su lucha por revertir el despido. A lo largo de los años, Antonio había desarrollado un fuerte vínculo con Cocky, e imágenes en redes sociales muestran al perro acompañando a su dueño en el autobús, lo que refuerza la idea de que su presencia no solo era significativa para el conductor, sino también aceptada por sus compañeros de trabajo y los pasajeros.
BBCL ha intentado comunicarse con la empresa Metropol para obtener su versión de los hechos, aunque hasta el momento no ha recibido respuesta. La situación ha generado diversas reacciones en redes sociales, donde muchos usuarios han expresado su apoyo a Antonio y su búsqueda de justicia en un caso que destaca la importancia de los animales de apoyo emocional en la vida de quienes enfrentan problemas de salud mental. La comunidad espera una pronta resolución que permita no solo la Readmisión de Antonio, sino también la protección de los derechos de los trabajadores en situaciones similares.
