Al menos cuatro personas han perdido la vida y dieciséis han resultado heridas en un devastador ataque masivo llevado a cabo por fuerzas rusas en la capital de Ucrania, Kiev, así como en otras regiones del país. Las autoridades locales han informado que el ataque, que tuvo lugar durante la madrugada del 6 de junio de 2025, involucró múltiples impactos en diversas localidades, incluyendo la región de Ternópil, donde se reportaron numerosos daños. El alcalde de Kiev, Vitali Klichkó, compartió la trágica noticia a través de su cuenta de Telegram y confirmó que los servicios de rescate continúan trabajando arduamente en la búsqueda de posibles sobrevivientes.
La Administración Militar Regional de Kiev ha señalado que este ataque estaba dirigido específicamente contra la infraestructura civil. En este sentido, se han reportado daños materiales significativos en seis distritos de la capital, lo que pone de manifiesto la naturaleza indiscriminada del bombardeo. Aunque las autoridades aún no han revelado el tipo exacto de armamento empleado en esta ofensiva, el alcalde Klichkó había advertido de la presencia de drones rusos en el espacio aéreo de Kiev, un fenómeno que se repite casi todas las noches, lo que señala una escalada en los ataques nocturnos.
En la región de Ternópil, el gobernador Viacheslav Negoda ha informado sobre la magnitud del ataque, catalogándolo como el más masivo que ha sufrido esta provincia desde el inicio del conflicto. Según sus declaraciones, se han registrado múltiples impactos y cinco personas han sido heridas en el asalto a infraestructuras industriales. Además, una parte de la ciudad se ha quedado sin suministro eléctrico, lo que complica aún más la situación. Este ataque ha suscitado el temor entre la población y ha llevado a un aumento en la urgencia de las medidas de protección civil.
Los informes también indican que la región de Volinia, en el noroeste de Ucrania, ha sido blanco de ataques con misiles y drones, causando al menos cinco heridos y daños estructurales en edificios residenciales en la capital regional, Lutsk. El gobernador Iván Rudnitski ha calificado este episodio como un «ataque masivo», reflejando la intensificación de la guerra en diversas áreas del país. Este tipo de agresiones continúa generando un clima de inquietud y vulnerabilidad entre los ciudadanos ucranianos, que enfrentan la amenaza constante de bombardeos.
La comunidad internacional observa con creciente preocupación estos ataques a la infraestructura civil en Ucrania, los cuales violan los principios del derecho internacional humanitario. La respuesta de las autoridades y la población frente a estas agresiones se torna crucial en la defensa de su soberanía y derechos humanos. En medio de esta grave situación, es imperativo que se tomen medidas urgentes para garantizar la seguridad de los ciudadanos y la protección de las infraestructuras vitales del país.
