En Colonia se ha inaugurado LUNA, una instalación pionera que recrea con gran precisión la superficie de la Luna. Esta infraestructura servirá para el entrenamiento de astronautas europeos y probará equipos que podrían ser utilizados en futuras misiones, como el programa Artemis de la NASA.
Un almacén aparentemente común en las afueras de Colonia, Alemania, alberga una de las instalaciones más avanzadas del mundo en simulación lunar. Bautizado como LUNA, este simulador ha sido desarrollado por la Agencia Espacial Europea (ESA) y ofrece un entorno de entrenamiento tan detallado que supera algunas de las condiciones recreadas por la NASA.
Un entorno realista: caminar sobre la Luna sin salir de la Tierra
LUNA, ubicado dentro del Centro Aeroespacial Alemán, se distingue por su meticulosa recreación del regolito lunar, la capa de polvo que cubre la superficie de la Luna. Con un área de 700 metros cuadrados (equivalente a más de tres canchas de tenis) y un techo de nueve metros de altura, la instalación simula las difíciles condiciones del entorno lunar.
El astronauta Matthias Maurer, de la ESA, explicó los desafíos de moverse por este terreno mientras llevaba un traje espacial:
“Cuando entras en la zona oscura y tienes la luz del sol frente a ti, es complicado orientarse. No sabes si estás ante un pozo poco profundo o un abismo”, relató.
900 toneladas de polvo lunar simulado
Para LUNA, la ESA desarrolló 900 toneladas de regolito lunar artificial (llamado EAC-1A), con características muy similares al material real. Este polvo es fino y abrasivo, como piedra pómez, y puede flotar al ser pisado, lo que representa un riesgo tanto para los astronautas como para los equipos.
En el entorno lunar real, el regolito está cargado de electricidad estática, lo que hace que se adhiera a las superficies cercanas. Durante las misiones Apolo hace más de 50 años, los astronautas enfrentaron serios problemas con el polvo lunar, que dañaba los trajes espaciales tras cada caminata.
Maurer destacó la singularidad del simulador:
«Esta instalación integra múltiples elementos que no se encuentran en ninguna otra parte del mundo, ni siquiera en la NASA».
Un paso clave para el programa Artemis
LUNA no solo beneficiará a los astronautas europeos, sino que también será clave en la preparación de futuras misiones internacionales. Los astronautas de la NASA utilizarán esta instalación para entrenarse antes de participar en las misiones del programa Artemis, que planea llevar nuevamente humanos a la Luna en los próximos años.
La apertura de esta innovadora instalación marca un avance significativo en la exploración espacial. LUNA posiciona a Europa a la vanguardia en tecnología de simulación y preparación para misiones más ambiciosas, que no solo buscan regresar a la Luna, sino establecer presencia a largo plazo en el espacio profundo.