Mantener los suelos limpios es esencial para tener un hogar limpio, ordenado y sin olores, especialmente si lo has comprado recientemente en sitios como Doomos.
Debido al constante tráfico de personas, el suelo es una de las zonas de la casa que más suciedad acumula.
La distribución de la suciedad y el desorden se agrava aún más si tiene mascotas o niños, ya que suelen pasar más tiempo fuera y traen más toxinas a casa.
Tanto si tiene superficies duras como zonas enmoquetadas, siga estos consejos esenciales para la limpieza de suelos que le ayudarán a mantenerlos con un aspecto y un olor a nuevo.
1. Limpie los derrames y las manchas con la fregona
La mejor manera de eliminar las manchas de suciedad o los derrames en las superficies duras es pasar la fregona a la antigua usanza. Cuando se trata de elegir la fregona adecuada para el trabajo, es una cuestión de preferencia personal. Por lo general, cuanto más resistente sea la fregona, mejor.
Pero hay diferentes tipos que pueden funcionar mejor dependiendo de la dureza de la mancha o del derrame. La fregona de hilo es siempre una buena opción para las manchas de suciedad y los derrames grandes, ya que absorbe el líquido inmediatamente y cubre grandes áreas de una vez.
Para las manchas más resistentes, basta con pulir pisando los hilos de la fregona y raspando la mancha hasta que se desprenda.
2. Coloca la alfombra de bienvenida
Los niños (y los perros) tienden a traer la mitad del exterior con ellos después de haber estado jugando. Una forma de formar una barrera contra la suciedad y el barro del exterior es colocar una alfombrilla en la puerta delantera y trasera.
Aunque pueda parecer anticuado, el fiel felpudo hace un gran trabajo eliminando el exceso de suciedad de los zapatos (¡y de las patas de las mascotas!) antes de que los culpables entren en casa. Enseñe a sus hijos a restregar sus pies en el felpudo antes de entrar en su casa para ayudar a reducir aún más la suciedad y el barro.
En el caso de las mascotas, también es útil tener una toalla vieja en la puerta trasera para poder frotar rápidamente sus patas antes de que entren.
3. Aspirar con regularidad
Las aspiradoras son una de las herramientas más esenciales en su kit de limpieza de suelos. Rápido y eficaz, aspirar con regularidad limpia la suciedad, el polvo, el pelo de las mascotas y los alérgenos más comunes, como el polen y las esporas de moho, dejando su casa impecable y libre de bacterias.
En la mayoría de los hogares, aspirar una o dos veces a la semana es suficiente, pero en las zonas más transitadas, como la cocina y el salón, puede ser necesario aspirar más a menudo. Intente aspirar toda la casa una vez a la semana con una limpieza detallada, centrándose en la alfombra, los zócalos, los sofás y la ropa de cama.
Entre las aspiraciones profundas, tener una aspiradora portátil a mano es una buena forma de retocar zonas y aspirar rápidamente los desechos comunes del suelo, como las migas de comida o el pelo de las mascotas.
4. Tenga cuidado al tratar los suelos de piedra
Los suelos de piedra natural son susceptibles de decolorarse y dañarse con determinados productos de limpieza.
Aunque las soluciones de limpieza caseras y naturales son excelentes para la mayoría de las superficies, es recomendable evitar el uso de soluciones de vinagre en los suelos de piedra. Incluso una pequeña cantidad de líquido ácido como el vinagre, la lejía o el amoníaco puede dañar estas superficies.
En su lugar, utilice un limpiador de suelos con PH neutro para evitar que los minerales de sus baldosas de piedra natural reaccionen de forma adversa. Si sus baldosas de piedra no están selladas, simplemente pase una mopa de microfibra y agua caliente.
5. Limpiar en seco los suelos laminados
Los suelos laminados deben limpiarse y tratarse de forma diferente a otras superficies. Nunca debe poner líquido o abrillantador en las superficies laminadas, ya que la humedad se filtrará bajo las tablas y arruinará el laminado.
En su lugar, es fácil limpiar sus suelos laminados utilizando una fregona seca y aspirando regularmente. Para las manchas o marcas de suciedad, utilice sólo un paño húmedo y pula cuidadosamente la suciedad.
6. Utilice una solución de vinagre natural para desodorizar las alfombras
Utilizar una solución de vinagre natural es una buena manera de eliminar los olores de las alfombras. Sólo tienes que llenar una botella de spray vacía con vinagre blanco y rociar sobre las manchas o superficies malolientes.
Esta solución también es útil para utilizarla como paso final después de limpiar los accidentes de las mascotas, ya que elimina por completo los olores persistentes de la zona. Pulveriza la solución de manera uniforme sobre la mancha y luego deja que se seque la zona.
También puedes utilizar levadura en polvo para desodorizar la alfombra. Llena un tarro agitador vacío con polvo de hornear (también puedes añadir aceites esenciales para obtener una solución con un olor agradable) y luego simplemente espolvoréalo de manera uniforme sobre tus alfombras. Deje que el polvo se asiente mientras absorbe los olores y la suciedad, y luego aspire.